Desde Arcópoli anunciamos que hemos comenzado los trabajos para interponer una denuncia contra la concejala de VOX Carla Toscano por las gravísimas declaraciones que realizó durante el pleno del Ayuntamiento de Madrid del martes 24 de junio. En sus intervenciones, cargadas de desprecio hacia el colectivo LGTBI+ y hacia nuestra entidad, se vierten afirmaciones que, a nuestro juicio, podrían constituir presuntos delitos de odio e injurias graves.

Toscano acusó a Arcópoli de “dedicarse a hablar de sexo a los niños”, restó valor a las denuncias que gestionamos en el Observatorio Madrileño contra la LGTBIfobia afirmando que se recogen “cosas sin pruebas, sin sentencias y sin condenas”, y llegó a vincular directamente la bandera LGTBI+ con “la corrupción de menores”, afirmando que:

“La bandera LGTBI representa una ideología que promueve una concepción absolutamente destructiva de la persona, y representa el totalitarismo. La bandera LGTBI es la bandera de la ideología de género, del adoctrinamiento, de la corrupción de menores, del victimismo, de los privilegios y de la desigualdad”.

Además, tachó el reparto de preservativos y lubricantes dentro del marco del Orgullo LGTBI+ promovido por la Comunidad de Madrid— como parte de “la orgía del Orgullo”, en un claro intento de sexualizar, estigmatizar y ridiculizar las acciones de prevención.

Toscano también aseguró que “no siempre que se agrede a una persona homosexual, es por ser homosexual”, negando la existencia misma de la LGTBIfobia. Y añadió:

“Si a alguien no le gusta una persona homosexual, ¿y qué? […] ¿Hacemos chiringuitos por cada persona que no nos gusta?”

Este discurso no solo trivializa las violencias que sufrimos las personas LGTBI+, sino que las blanquea desde la tribuna institucional, cuestionando abiertamente la necesidad de protegernos ante delitos de odio.

Desde Arcópoli consideramos que todas estas declaraciones van mucho más allá de una opinión personal o un posicionamiento ideológico: atacan la dignidad de las personas LGTBI+, promueven prejuicios dañinos y contribuyen a la normalización del odio.

“Nosotras no aceptamos que se nos calumnie ni que se siembre odio contra nuestro trabajo. Lo que ha hecho Carla Toscano es intolerable, y por eso estamos trabajando en una denuncia. Esperamos que la justicia actúe con la seriedad que merece este caso”, ha declarado Luis Fernando Rosales, Coordinador General de Arcópoli.

 

Desde Arcópoli, estamos analizando con nuestro equipo jurídico si las manifestaciones de Carla Toscano podrían encajar en varios tipos penales, entre ellos un presunto delito de odio, tipificado en el artículo 510 del Código Penal. Nos preocupa especialmente la carga de desprecio sistemático hacia el colectivo LGTBI+, al que se vincula con prácticas delictivas como la corrupción de menores o el adoctrinamiento. Aunque dichas acusaciones se expresan de forma indirecta, la formulación y la intención de su discurso —y el contexto en el que se produce— podrían ser considerados como una incitación al rechazo social hacia nosotras. Además, la acusación directa contra Arcópoli, afirmando que “nos dedicamos a hablar de sexo a menores” sin prueba alguna y desprestigiando el Observatorio Madrileño contra la LGTBIfobia, podría ser constitutiva de un presunto delito de injurias graves contra entidad con proyección pública. Estas afirmaciones no están protegidas por la libertad de expresión: son falsas, vejatorias y están dirigidas a sembrar desconfianza y deslegitimar el trabajo de una entidad que lleva más de una década documentando agresiones, acompañando a víctimas y defendiendo los derechos de las personas LGTBI+.

El Observatorio Madrileño contra la LGTBIfobia

Arcópoli es la organización que impulsó el Observatorio Madrileño contra la LGTBIfobia desde 2016, coincidiendo con la entrada de la ultra derecha a las instituciones, el observatorio es un referente estatal en el análisis, documentación y denuncia de incidentes de odio contra las personas LGTBI+. Nuestro trabajo ha sido reconocido por administraciones, universidades y medios de comunicación, y ha acompañado a cientos de víctimas desde su creación.

 

Llamamiento institucional desde Arcópoli

Desde Arcópoli hacemos un llamamiento expreso a todos los partidos democráticos a condenar de forma pública y firme las declaraciones de la concejala Carla Toscano. El discurso de odio nunca puede ser tolerado ni normalizado en las instituciones. Especialmente apelamos al Ayuntamiento de Madrid, que este año vuelve a despreciar la bandera LGTBI+ negándose a colocarla en la fachada de Cibeles, como símbolo del respaldo y el reconocimiento de las personas LGTBI+. Hoy, más que nunca, es imprescindible que las instituciones estén a la altura y defiendan a quienes somos blanco del odio, del desprecio y de la desinformación.

 

Frente al odio, no nos callamos. Responderemos en los tribunales y en las calles, con firmeza y sin miedo.